Es una deformidad facial que se describe por la presencia de una discrepancia anteroposterior entre la mandíbula y el maxilar (la mandíbula está desarrollada por exceso en relación con el maxilar).
Se detecta:
- Cuando el hueso de la mandíbula presenta un crecimiento anormal por exceso respecto del maxilar, lo que se conoce como problema esquelético.
- Cuando el paciente presenta un exceso de mentón.
- Cuando la mandíbula prominente se debe a un problema dental, esto es, cuando los dientes se encuentran desalineados entre sí.
Es más que un problema estético, un prognato suele tener problemas para cerrar correctamente la boca, y muchas personas que lo padecen tienen importantes dificultades para hablar, morder o masticar, además de experimentar un dolor crónico en la articulación de la mandíbula.
Además, el aspecto “anormal” puede conducir a importantes problemas psicológicos, especialmente en adolescentes y adultos jóvenes.
Suele aparecer cuando existen:
- Factores genéticos: antecedentes familiares de prognatismo. En este sentido, el mentón prominente de muchos integrantes de la Casa de los Austrias españoles es un perfecto ejemplo histórico de prognatismo hereditario.
- Pérdida temprana de las muelas de leche: si estas piezas se caen antes de lo debido, pueden originarse problemas mandibulares que no se corregirán por sí solos, y el niño podría acabar convirtiéndose en prognato.
- Problemas en la hipófisis: el síndrome de Crouzon, el gigantismo o la acromegalia, todos problemas derivados de la producción excesiva de la hormona del crecimiento, son también responsables de muchos casos de prognatismo mandibular.
Las tres soluciones clásicas a este problema son, respectivamente:
- Una cirugía ortognática bimaxilar, cuando el cirujano maxilofacial necesita intervenir quirúrgicamente sobre el hueso mandibular y maxilar, o una cirugía ortognática monomaxilar, cuando el cirujano maxilofacial sólo actúa sobre una de las dos estructuras esqueléticas. Según el caso deberá ir acompañada de un tratamiento de ortodoncia.
- Una mentoplastia o cirugía del mentón de reducción.
- Un tratamiento de ortodoncia.
A continuación tenéis un vídeo de como sería la cirugía ortognática bimaxilar, no dejan cicatrices externas ya que la realizan por dentro de la boca.